Hay dos cosas que me repiten mucho las personas que me escriben. Dos temas diferentes.
Me escriben muchas veces para preguntarme cómo conseguir motivación para lanzar su negocio o cambiar su carrera o incluso para otros temas, aunque yo sólo me centre en esos dos.
Es un tema muy, muy requerido.
Aida, ¿cómo consigo la motivación que necesito?
Y el otro es el apoyo.
No tengo el apoyo de nadie, me gustaría que me apoyaran mi pareja/familia/amigos...
Dos temas sobre los que quiero hablar porque son fundamentales para tu satisfacción y para hacer algo en la vida.
Así que vamos a ello.
Sobre la MOTIVACIÓN lo más importante son estas dos cosas:
1. Muchas, muchas veces la motivación llega cuando ya has empezado. No antes.
Así que esperar es perder el tiempo.
Lo que necesitas es tener muchas ganas y razones para hacerlo. Porque te gusta, porque te apetece probarlo, porque te dará libertad, por X, Y, Z.
Que tus razones y ganas sean la motivación.
2. No es motivación lo que necesitas, es compromiso.
Cuando te comprometes lo das todo. No piensas en tener motivación, lo haces y punto.
Porque es algo que quieres y porque te has comprometido contigo misma o mismo a ello.
Así que la pregunta para ti es:
¿De verdad quiero esto?
¿De verdad, de verdad?
¿Seguro?
¿Por qué? Nombra al menos 15 razones.
Cuando tengas eso claro, te pones y lo haces.
Y dejas de pensar en la motivación. No pienses en ella. Solo ten claro lo que quieres y hazlo.
--Y la segunda parte. APOYO--
Sobre esto leí algo el otro día que me encantó y que yo misma uso.
Se lo escuché a Marissa Peer, una terapeuta a la que últimamente escucho mucho, he hecho uno de sus cursos y ahora estoy leyendo un libro suyo.
Y ella dice que muchas veces lo que nos para en la vida es esperar que los demás nos apoyen y nos alaben o nos digan lo que de verdad queremos oír.
Y nos pasa a TODOS.
A ti también, sí.
Lo que pasa es que alguna personas seguimos adelante igual, pensamos que sí que nos gustaría tener más apoyo pero que si no pues lo hacemos igual.
Pero otras se quedan estancadas o resentidas y no avanzan en su vida.
¿La solución?
Aprender a ser tu mejor apoyo. Decirte tú lo que necesitas que te digan. Porque ya no eres una niña o un niño chico que depende al 100% de sus padres.
Eres una persona adulta.
Así que piensa esto: ¿qué es lo que más te gustaría que te dijeran tus padres o tu pareja o las personas que son importantes para ti?
Lo que realmente desearías que te dijeran.
Por ejemplo: eres una buena hija, tú puedes conseguirlo, estamos orgullosos de ti, eres perfecta o perfecto como eres, te vamos a querer siempre.
Lo que sea que tú necesitas oír.
Y dítelo a ti misma.
Sé que te parece algo chocante, que pensarás que no va a ser lo mismo.
No es lo mismo. Es mejor.
Porque ¿sabes a quién haces más caso que a nadie? A ti misma.
La gente puede decir misa que si tú no te lo crees no te lo crees.
¿O no?
Como siempre te digo pruébalo. Prueba varios días a decirte lo que más quieres oír a ti misma.
Para que al final aunque te guste que alguien más te lo diga, no lo necesites, porque ya te lo dices tú.
Es normal querer aprobación y apoyo y que te guste. Otra cosa es necesitarlo.
Sólo necesitas tu apoyo y aprobación.
Y lo conseguirás hablándote a ti misma, diciéndote lo que quieres oír.
Total, te vas a hablar igual, todos lo hacemos. Así que mejor decirte cosas que te ayuden, ¿no?
Pruébalo. No pierdes nada y puedes ganar MUCHO.
Así que tus "deberes" para hoy son: lista de las razones por las que quieres hacer lo que quieres hacer.
Pensar en que es lo que más te gustaría oír de esa o esas personas que tienes en mente y decírtelo a ti misma.
