Hoy quiero contarte cómo fue la primera vez que instalé un sistema de ventilación con recuperador de calor.

La historia tiene más errores que una paella con chorizo. Pero vale la pena que la leas, sobre todo si estás pensando en instalar uno de estos sistemas o si ya lo tienes y algo no te cuadra.

Te hablo de hace unos 15 años.

Por aquel entonces, estos equipos eran casi ciencia ficción.

La mayoría de gente ni sabía qué eran.

Hasta que un cliente se animó. Dijo:

—Venga, vamos a ponerlo. Confío en ti.

Yo estaba verde, pero con ganas. Y busqué una empresa instaladora.

Todo parecía ir bien.

Hasta que abrí la boca:

—¿Habéis instalado sistemas como este antes?

Y entonces me soltaron el combo letal:

– “Sí, sí, no te preocupes”

– “Hemos montado muchísimos”

– “Tenemos mucha experiencia con estos equipos”

Hoy esas frases me pondrían los pelos de punta.

Entonces… me tranquilizaron.

Error.

Cuando acabaron la instalación, nada funcionaba como debía:

💧 Tubos con condensación.

🎧 Ruidos molestos.

🌀 Rejillas donde no llegaba ni una pizca de aire.

La empresa justificándolo todo con frases como “es normal” o “estos sistemas son así”.

Pero no. Yo sabía que algo no encajaba.

Conseguí contactar con el soporte técnico del fabricante.

Revisamos toda la instalación.

Veredicto: Todo mal.

Hubo bronca. Rehacer instalación. Más tiempo. Más dinero. Más disgustos.

Pero al final conseguimos que el sistema funcionara aceptablemente.

Hoy, afortunadamente, todo ha cambiado.

Estos equipos están más estandarizados.

Hay más fabricantes serios. Más técnicos preparados.

Aun así, si no hay una buena prescripción y un control de ejecución, sigue habiendo riesgo de que te vendan humo... y encima lo respiras.

🎯 Por eso he preparado una masterclass sobre ventilación que te explica todo lo que necesitas saber para evitar errores, saber qué exigir y por qué esto NO es un lujo, sino una necesidad.

👉 Puedes conseguirla ahora a precio reducido hasta el día 25.

Después, como siempre, sube de precio.

No digas que no te avisé.

P.D. Si has tenido algún problema con tu sistema de ventilación, contéstame a este mail. Me encantará escucharlo. A veces un error compartido vale más que un tutorial de YouTube.

P.D. 2 – Si esta historia te ha gustado, reenvíasela a ese amigo que siempre dice que su casa huele raro, que no duerme bien o que tiene la cabeza como un bombo al despertarse. Puede suscribirse a la newsletter desde aquí

PD3- Como hoy es domingo, tambien te doy acceso a un recurso gratuito. En este caso un articulo que escribí para nuestro blog hace unos años, pero que te dará muchas pistas sobre muchas cosas.