Las cosas van bien, tu chica está lista para el acto y de repente
descubres que el caucho permanece quieto allá abajo, sin ánimos
de levantarse.

¿Por qué pasa?

Una de las peores situaciones que puede vivir un hombre es no 
tener una erección sólida que le permita hacer gemir a la mujer
que tiene en frente.

Es una situación vergonzosa...

Entonces vienen los intentos de hacer que se levante...

Pero sigue ahí, relajado y sin ánimos de seguir jugando.

Muchos hombres han vivido situaciones similares, y han superado
el obstáculo con lo que aquí se describe:

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Tu amigo,

Esteban