El otro día me escribió un chico diciéndome que había intentado usar mi formulario para solicitar trabajar conmigo y le salía error así que había copiado las preguntas del formulario y me las enviaba por email.
Le respondí y contrató una sesión.
¿Qué habría hecho mucha, mucha gente al ver que el formulario no funcionaba?
Esto no funciona, paso.
Esto no funciona, señal de que no es para mí.
Esto no funciona, vaya profesional que su formulario no funciona.
Muchos reaccionarían así.
Otros me escriben por email, planificamos una sesión y solucionamos su problema.
Una cosa que me habrás oído decir varias veces en mis emails o en entrevistas varias es que hay dos tipos de actitudes cuando aparece un obstáculo:
- Esto es una señal de que no va a funcionar.
- A mí esto no me va a parar.
Mucha gente pertenece a la primera. Yo no, mis clientes tampoco.
Si hasta ahora pensabas lo primero, es lógico, nos han metido mucho en la cabeza que todo en la vida son señales. Es hora de plantearse otras formas de ver la vida que no sean parar ante el primer obstáculo.
En fin, si te gusta pensar en señales, es cosa tuya.