La historia de Friend y sus 47 planes de vida diferentes.

Hace unos meses, si hubieras mirado el escritorio del ordenador de Friend, ¿sabes qué habrías encontrado?

- 3 cuadernos de notas con ideas de negocio.
- 5 cursos online a medio terminar (o más...).
- 12 libros de desarrollo personal.
- Un excel con pros y contras de cada decisión posible.
- Y una taza de café que siempre estaba llena (para mantenerte despierta y activa, o eso dicen. En mi caso sería agua, o té).

Y es que Friend era experta en buscar respuestas.

De hecho, cada mañana se despertaba con una idea nueva:

"Debería hacer un máster"
(Al día siguiente) "No, no... mejor monto mi consultoría".
(A la semana siguiente) "¿Y si mejor me cambio de sector?".

Cada opción parecía posible y realista... hasta que encontraba la siguiente.

Y así, en su intento de tomar "la decisión correcta", Friend iba saltanto de posibilidad en posibilidad. Se había convertido en una coleccionista profesional de posibilidades.

¿El problema? Ya lo sabes...

Cuanta más información acumulaba, más perdida se sentía.

"Necesito investigar un poco más".
"Cuando lea este libro tendré la respuesta".
"Después de este curso lo veré claro".


(Todas hemos hecho esto, todas y todos).

Hasta que un día, mirando pantalla de ordenador y sus libretas (si eres como yo, usas libretas y notas 😉 ) y leyendo una newsletter de Aida, una de sus coaches de referencia 😉, Friend se dio cuenta de que:

No necesitaba más información.
Necesitaba claridad, saber por dónde empezar, cómo abordarlo todo.

Y se dio cuenta también de que... 

La claridad no viene de acumular más opciones, sino de saber exactamente cómo filtrar las que ya tienes.

Cuando aprendes a filtrar no necesitas 47 planes diferentes porque tienes claro cuál es el tuyo.

Ayer lo hablaba con una clienta precisamente.

La diferencia la marca el saber filtrar, saber elegir, saber lo que quieres y poder ponerte en marcha.

Si te sientes identificada con esta pequeña historia que representa a muchas personas, si tú también tienes "demasiadas pestañas abiertas" (literal y metafóricamente)...

Mi programa "Qué Hacer Cuando No Sabes Qué Hacer" te dará exactamente el plan que necesitas para pasar de la confusión a la claridad.

No más cuadernos llenos de ideas sin concretar.
No más cursos sin terminar.
No más dar vueltas en círculos.

Solo un camino claro hacia adelante.

Tu camino.

Porque quizá no necesitas más información sino saber qué hacer con ella.

Si estás lista para despejar tu escritorio (y tu mente), pincha aquí y empieza definir tu camino. Estaré encantada de ayudarte.

Un abrazo,