Hoy vamos a hablar de un tema interesante y muy importante: esfuerzos útiles y esfuerzos inútiles.
Decía Ortega y Gasset que el esfuerzo inútil conduce a la melancolía.
Con esfuerzo inútil se refiere a cuando te empeñas o centras en algo que tú sabes que no va a funcionar, lo sabes de antemano, sabes que no te hace o te va a hacer feliz pero tú sigues ahí esforzándote.
Y eso te lleva a un estado de melancolía, de tristeza, de insatisfacción. De vacío.
¿Y por qué te ibas a esforzar en algo que sabes que no da más, que no te ayuda ya?
Puede haber múltiples razones pero, independientemente de cuál sea la tuya, en el fondo tú ya sabes que no, que no va a funcionar.
Ese es el esfuerzo inútil, el que te va a llevar a una sensación de vacío y tristeza.
¿La solución?
Centrarte en un esfuerzo útil, es decir, aquel que te beneficia y te hace feliz.
Piénsalo detenidamente, ¿qué sería un esfuerzo UTIL para ti?
Será distinto para cada persona y merece la pena revisar qué estás haciendo, a qué le estás dedicando tus esfuerzos y si es útil o no.
Si te hace avanzar o no; te hace feliz o no.
Párate a pensarlo partir de ahora y emplea tu tiempo, esfuerzo, dinero y energía en cosas que no te hagan sentir triste y vacía.