Hola Friend,
Hoy te traigo un ejercicio que te va a ayudar mucho si estás pensando en un cambio profesional o estás emprendiendo.
Pero antes de eso, ¡muchas gracias por los deseos de recuperación! Se agradecen mucho. Sigo en casa con síntomas y cansada y se me está haciendo eterno, ya son 12 días...
Pero ya estoy empezando poco a poco a trabajar.
Vamos al grano. Hay algo a lo que te vas a enfrentar sí o sí si cambias de profesión o te lanzas con tu negocio o quieres hacer algo diferente.
Críticas.
No falla, siempre vas a tener críticas o comentarios molestos y con mala intención. Es así, forma parte del proceso, no te vas a librar.
No es agradable, aunque a mí personalmente no me afectan demasiado (luego te digo por qué), pero a muchas personas les para, no se animan a hacer algo por el miedo a las críticas de los demás.
Y eso es lo malo. No que te digan algo, sino que no te atrevas a hacer lo que quieres por opiniones ajenas.
Pero hay algo que puedes hacer
Prepararte para lo que te van a decir. Ese va a ser tu as en la manga.
¿Y cómo?
Es un ejercicio que explicaba Brené Brown en una de sus charlas TED.
Piensa en tres personas que tú sepas que te van a criticar de alguna manera. Tú sabes quienes son. Luego puedes añadir una cuarta, que eres tú misma, tu propio crítico, ese siempre es el peor porque nos afecta más lo que nos decimos a nosotras mismas que lo que nos dicen los demás.
Ten eso muy en cuenta.
Piensa en esas tres o cuatro personas y en qué crees que te van a decir.
¿Tú vas a hacer eso? Pues ya hay mucha gente no sé como vas a hacerlo tú, son mejores que tú, vas a fracasar otra vez, ¿con esa cara/pelo/acento?...
Tú lo sabes bien. Piénsalo y prepárate para ello.
No siempre tendrás que contestarles, a veces solo con pensar para ti tu respuesta es suficiente.
Pensar: no estoy de acuerdo.
Pensar: no voy a dejar que tus miedos o dudas me afecten, sé lo que quiero.
Pensar: esa es tu opinión no la mía.
Si quieres se lo dices, si te llegan a criticar y si no, pues lo piensas y contrarrestas esa crítica.
Sé tu mejor amiga, tu animadora, tu mejor apoyo, el apoyo que a lo mejor no tienes.
Y prepara las respuestas.
Antes te decía que a mí las criticas me entran por un oido y me salen por otro. Y sé por qué es, no porque yo sea super fuerte, especial y triunfadora.
Es porque sé lo que quiero y por qué lo quiero.
Cuando tengo claro que quiero algo y por qué, ya puede venir media España a criticarme que me da absolutamente igual. Criticar es muy, muy fácil.
Dar la cara, arriesgarte, saltar, intentar, eso es lo difícil. Para criticar no necesitas ni media neurona.
Y cuando sabes lo que quieres y por qué lo quieres y encima te preparas las respuestas o directamente evitas a quien intenta hundirte, te vuelves imparable. Tienes una confianza en ti ciega.
Si te dijera los mil comentarios que he recibido en mi vida al dejar la ciencia, ser coach, aprender a surfear, no ir a eventos de networking, seguir escribiendo en mi blog y muchos otros temas. Críticas nunca faltan y consejos aparentemente bienintencionados.
Yo solo acepto consejos de quien está en el ruedo también. Criticar y opinar desde tu sofá es facilísimo.
Ten claro lo que quieres y por qué, esa es mi arma secreta. Parece fácil pero la mayoría de la gente no tiene esa claridad.
No pasa nada, yo hay épocas en que tampoco y entonces entran las dudas por las grietas...
Cuando los cimientos son sólidos no hay grietas, por ahí no entra nada de nada, hormigón armado y pulido, todo queda fuera. Y abres la puerta a quién tú quieres.
Esa claridad la obtienes sabiendo lo que quieres, es algo que lograrás con mi curso para profesionales estancadas. Saber qué quieres personal y profesionalmente y desarrollar confianza en ti misma aprendiendo a tomar decisiones y a afrontar miedos e imprevistos.
Es este.
Esa claridad la obtienes en mi programa de mentoría para emprendedoras en el primer módulo, cuando construimos los cimientos de tu negocio. Y la confianza cuando sabes qué hacer para que tu negocio tenga clientes e ingresos.
Es aquí.