El otro día estaba haciendo un curso y preguntaba una persona si tenía que hacerse una cuenta de YouTube para hacer comentarios.
Como si fuera una gran molestia.
Y entonces me di cuenta de que todos hacemos cosas así. Todos.
Por ejemplo, mira que bobada. Hace un par de años o así me plantee perder peso y empecé a buscar métodos que no fueran dietas. ó me estaba plantando adelgazar.
Pero a todos le ponía pegas.
¿Tengo que pesarme todos los días? No
¿Tengo que pesar los alimentos? Va a ser que no.
También he tenido personas interesadas en alguno de mis cursos que veían abrirse una cuenta en Facebook, por ejemplo, como un montaña inescalable.
Cada uno tiene sus razones, la cuestión es que esos pequeños detalles, que no son nada en realidad, ¿sabes lo que hacían?
Hacer que no hicieras el curso. O lo que sea.
Que algo nimio como pesarse todos los días durante un tiempo o abrirte una cuenta de en una red social solo para eso (y que luego puedes borrar si quieres) te hacen descartar cosas que te pueden ayudar mucho.
Comprarte unas zapatillas para empezar a hacer deporte.
Tener que encender el horno en verano.
¿De verdad no vas a sacar partido a un curso por no abrirte una cuenta? ¿Con la diferencia en tu vida que puede suponer ese curso?
¿De verdad no vas a acabarlo o te vas a quedar con dudas porque te parece una molestia poner un comentario o porque te da pereza oír un audio o porque lo preferirías por escrito?
¿De verdad no vas a mejorar tu salud porque te parece un rollo pesarte?
(spoiler: un día me dije: si sigues haciendo y pensando como siempre no lo vas a conseguir, así que prueba algo nuevo aunque te de pereza o no te apetezca y si no te funciona lo dejas de hacer.
Hice lo que tenía que hacer y perdí 15 kilos.)
¿Qué detalles nimios están impidiendo que hagas algo que sabes que te ayudaría mucho?
Y sé lo que cuesta por muy nimios que sean pero piénsalo. No es más que otra forma de autosabotaje.
Decide lo que quieres hacer. Decide que quieres hacerlo por X e Y razones y que no te paren nimiedades o no conseguirás nada.
Recuerda a menudo esa pregunta:
¿Qué detalles nimios están impidiendo que hagas algo que sabes que te ayudaría mucho?
Al menos serás consciente de ello y te aseguro que tendrás muchos mejores resultados.