Aquí vengo quizá con un pequeño mazazo para ti.
Estoy leyendo un libro sobre una librería en El Cairo, una historia real; y en un momento, hablando de la situación de Egipto, dice la prota:
Nos tragamos la pastilla de que “nosotros construimos las pirámides” para sentirnos bien, mientras nuestra casa se derrumba a nuestro alrededor.
¿A qué te recuerda?
A mí a esas veces en que nos aferramos a algo, es que he estudiado ya cinco años, es que llevo 20 años haciendo esto, es que mira lo que gano, es que…
Te aferras a algo del pasado, a tus glorias del pasado, en vez de centrarte en cómo estás ahora y en lo que quieres para el futuro.
Está bien recordar, estudiar y admirar las glorias del pasado, pero no te embeleses tanto que olvides que el presente ya no es ese y que a lo mejor no estás construyendo lo que quieres o se está derrumbando todo.
Sé que duele, te avisé.
Céntrate en el futuro. Dónde estás, cómo quieres verte en un año o en cinco, cómo lo vas a conseguir.
Y que el pasado sea una foto para recordar y ya.
Si prefieres seguir aferrada a las glorias del pasado, ya no puedo hacer nada más.