Hoy empieza la PAU.
La temida, la esperada, la Selectividad de toda la vida. La frontera simbólica que separa los años de pupitre de los primeros pasos por cuenta propia.
Miles de jóvenes la enfrentan hoy, con el estómago encogido y la cabeza a mil.
Y este año, por primera vez desde hace decadas, desde que la pasé en primera persona, no lo vivo como espectador.
Lo vivo desde dentro, porque la niña de mis ojos –esa que llegó a mi vida para ponermi vida patas arriba y, a la vez, para darle sentido a todo– se enfrenta a esa prueba.
Podría decir que estoy nervioso, pero mentiría.
Aquí en casa no hay sobresaltos, ni carreras, ni lágrimas.
Hay serenidad.
Y hay orgullo.
Porque ella llega preparada.
Porque ha hecho el trabajo, el visible y el invisible.
Porque tiene una calma que yo no tenía a su edad.
Y sobre todo, porque sabe quién es y qué quiere.
Lo tenga todo claro o no (¿quién lo tiene, de verdad?), lo importante es que camina con paso firme.
Y eso, para mí, vale más que cualquier nota.
Así que hoy solo quiero decirte, hija, que lo estás haciendo muy bien.
Que si esta etapa es un examen, tú ya lo has aprobado hace rato.
Y que no hay futuro más prometedor que el de alguien que se conoce y se respeta.
Y a quienes están hoy en el mismo punto, un abrazo grande.
Esto también pasa.
Pero lo que viene después, eso es lo verdaderamente importante.
Y si tú estás en tu propia "selectividad" profesional…
Si quieres dejar de improvisar y empezar a vender con método y confianza…
👉 Aprovecha ahora para hacerte con las que te falten de las tres masterclasses que he lanzado.
Porque si las compras ahora, la cuarta –que está al caer– te saldrá completamente gratis.
Sin trucos. Sin letra pequeña. Solo para los que entienden que llegar preparado no es suerte, es decisión.
Es mi forma de agradecerte tu confianza y tu fidelidad.
PD1: Esta dedicatoria no está en un libro ni en una placa, pero va grabada en lo más profundo: hija mía, gracias por enseñarme que la mejor versión de uno mismo no se impone… se construye con paciencia y con amor.
PD2: Si tú también quieres caminar con esa seguridad que da saber lo que haces, empieza por aquí:
La Fórmula para Saber si tu Obra es Viable (Antes de Gastar un Solo Euro)
Cómo Diseñar Viviendas Eficientes Desde el Primer Trazo
Lo que Nadie te Cuenta Sobre las Ventanas… Hasta que es Demasiado Tarde