Subject: La clave no está en la batería: está en esto que nadie te cuenta

Como sabes, esta tarde doy una charla.


Y no es una cualquiera.


Voy a contar por qué, cuando todo el país se quedó a oscuras, mi casa siguió funcionando como si nada.


Y no, no se trata de tener techos cubiertos de paneles solares ni baterías del tamaño de una habitación.


Tampoco de invertir miles de euros en instalaciones que luego apenas entiendes.


Eso ayuda, claro.


Pero no es la clave.


La verdadera clave está en otra parte. En algo que casi nadie tiene en cuenta: el propio diseño del edificio.


Porque si un edificio está bien pensado desde el principio —y me refiero a pensado de verdad—, puede mantener confort, incluso cuando todo lo demás falla.


Y en ese momento… es cuando desaparece el miedo.


Cuando puedes dejar de preguntarte “¿y si mañana…?”


Cuando te das cuenta de que la resiliencia energética no es un lujo: es una necesidad.


Y si esto te interesa (que debería), hoy te recomiendo un libro que deberías leer con calma:
"De la casa pasiva al estándar Passivhaus" de Micheel Wassouf.


Sencillo. Claro. Directo.


Escrito por una de las voces más autorizadas del mundo Passivhaus en español.


Lo tienes en versión Kindle. Y en papel. Tú eliges.


👉 Version kindle o version papel


Ya se que normalmente os doy recursos gratuitos. Pero en este caso, aunque sea de pago, vale mucho mas de lo que pagas.


Y ahora una pista más…


Estoy terminando una nueva masterclass que verá la luz en unos días.


Trata sobre un elemento aparentemente inocente, pero que puede cargarse el rendimiento energético de un edificio en segundos si no se trata bien: la ventana.


Sí, la ventana.


Ya te contaré más muy pronto.